martes, 17 de enero de 2012

Una historia que se desmorona

Esta es la pequeña historia de como dos personas pasaron de ser desconocidos a conocidos, con una simple frase “tienes dm”, en la que sería una de las noches más largas  y emocionantes de su vida. Después de largas horas de plática, a través del dm, en la que ambos dieron a conocer sus gustos musicales, de comida y demás estas dos personas decidieron pasar a la siguiente etapa.
Con una simple oración escrita por ella sumiéndose en su más profundo voto de fe envió un mensaje que contenía las palabras más felices que Él en cualquier momento de su vida leería. 
Muchos se preguntarán que, ¿qué decía tal mensaje? Pues todos conocen la respuesta a esta pregunta. El mensaje y cito textualmente decía “Oye, me caes muy bien y pareces ser una buena persona. Hablar por dm puede ser muy fatigante, ¿por qué no me das tu pin y seguimos hablando por ahí?”.
No pasaron 2 minutos cuando su mensaje ya había sido contestado, pudo observar que él había aceptado la invitación y que le había enviado su pin.
Minutos más tarde se agregaron mutuamente en BlackBerry Messenger y continuaron hablando toda la madrugada.  ¿El tema de conversación? Pues eso no importaba, ya que lo único importante en esos instantes era que de un lado él pensaba: “Wao, por fin me habló, esto no puede estar sucediendo” y por otro lado ella pensaba: “Esto es imposible, este chamo que siempre me gusto, que es mi crush y nunca he revelado a nadie por fin me esta hablando. Si solo supiese lo mucho que me encanta”.
Llegado el amanecer ambos se despidieron con mucho amor y se fueron a dormir, mas no lograron conciliar el sueño sino muchas horas más tarde, ya que no podían olvidar la maravillosa conversación que ambos habían tenido.
A la mañana siguiente la disyuntiva se presentó. El no sabía si hablarle y ella pues menos, ambos se resignaron a perder su orgullo y escribirle al otro así que simplemente se sentaron a esperar. A Él se le ocurrió escribirle indirectas por twitter pero a esto ella pensó: “Eso no puede ser para mí, soy demasiado fea, seguro es para otra”. En vista de que no había respuesta alguna él simplemente se dedico a stalkearla y esperar alguna respuesta, una señal de vida.
Varios meses transcurrieron en el calendario y ambos encontraron otros amores pero nunca lograron sentir lo que aquella maravillosa madrugada sintieron, aquella madrugada en la que ambos conocieron a su alma gemela más no se atrevieron a traspasar la barrera de las palabras y llegar a las acciones por culpa de la más cruel y despiadada excusa “El orgullo”.
El orgullo y el amor como la luz y la oscuridad, dos entes perfectos que en el mismo lugar nunca se podrán encontrar.
Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.